Van pasando los días y echaba de menos pasar un ratito dulce con todos vosotros...
Qué tal ha comenzado el año? Os deseo que al menos la mitad de vuestros sueños se cumplan, que sé que os lo merecéis ^^
Hoy vengo como narradora, porque la verdad es que la tarta que os traigo no la he elaborado yo, sería colgarme una medalla que no me corresponde, mi papel sólo ha sido el de "guía espiritual", jajaja
Es una tarta rústica que ha horneado una de mis hijas, realmente ha hecho todo, desde la idea de la decoración hasta el montaje y ha sido preparada con el ingrediente imprescindible a la hora de realizar cualquier plato y más aún tratándose de un regalo para alguien a quien se aprecia: EL CARIÑO.
Espero que os guste y recibir un montón de comentarios, no por mí, si no porque sé que ayudarán a que siga disfrutando de la cocina, cosa que como mamá que comparte esa afición, me encanta :)
Tarta de vainilla de tres pisos,
con una rica butter cream sin colorantes.
Decorada con frutas del bosque, riquísimas!!
Aportan frescura, aroma, sabor y una bonita mezcla cromática.
Como detalle final, una cinta de rafia en color verde oliva.
Creo que quienes disfrutamos de la preparación de platos para los nuestros, hacemos tartas personalizadas o cualquier tipo de labor artesanal, sabemos apreciar el encanto de los regalos elaborados en casa, sea lo que sea, desde un simple vasito con una cinta alrededor, da igual!!
Siempre será algo único y eso es impagable...
Besitos a todos!
Estoy deseando enseñar los comentarios a mi repostera!!